Esto en Pacientes con Mutación Genética Específica
InfoSalud/ Internacional.- Una prometedora inmunoterapia, basada en un anticuerpo humanizado de ratón llamado dostarlimab, ha logrado resultados extraordinarios en el tratamiento de diversos tipos de tumores sólidos que comparten una mutación genética específica. Un reciente estudio, publicado en el New England Journal of Medicine, reveló la aparente desaparición del cáncer en el 80% de un centenar de participantes con tumores de esófago, estómago, colon, hígado, vejiga, útero y próstata. Este avance se suma a los resultados igualmente notables obtenidos previamente en pacientes con cáncer de recto, donde el tratamiento logró la remisión completa en el 100% de los casos analizados inicialmente.
La terapia, denominada inmunoablativa por su capacidad de eliminar el tumor mediante la inmunoterapia, actúa bloqueando la proteína PD-1, un freno natural del sistema inmunitario. Al liberar las defensas del organismo, el propio sistema inmune puede atacar y destruir las células cancerosas con mayor eficacia. Este mecanismo se basa en el descubrimiento del científico japonés Tasuku Honjo, galardonado con el Nobel de Medicina por su revolucionaria contribución al campo de la inmunoterapia contra el cáncer. La oncóloga Ana Fernández Montes, ajena a la investigación, califica estos resultados como un «cambio de paradigma», ya que el tratamiento ofrece una alternativa menos agresiva a la cirugía, la radiación o la quimioterapia.
El estudio, liderado por los oncólogos Andrea Cercek y Luis Alberto Díaz del Centro Oncológico Memorial Sloan Kettering, seleccionó a pacientes cuyos tumores presentaban una deficiencia en la reparación de errores de emparejamiento (dMMR), una mutación genética que los hace particularmente sensibles a los inhibidores de la proteína PD-1 como el dostarlimab. Los investigadores estiman que esta vulnerabilidad genética podría estar presente en el 5-10% de los cánceres de recto y en el 2-10% de otros tumores sólidos. Los resultados mostraron una respuesta completa, es decir, la desaparición de todo signo de cáncer, en 84 de los 103 pacientes tratados.
El oncólogo Luis Alberto Díaz se mostró exultante ante estos «increíbles resultados», destacando que los primeros pacientes con cáncer de recto tratados con dostarlimab hace más de cinco años permanecen libres de enfermedad, lo que sugiere una posible curación en estos casos. Aunque la terapia tiene un costo elevado por dosis, los investigadores argumentan que a largo plazo podría resultar más económica al evitar tratamientos más costosos y con mayores efectos secundarios como la quimioterapia, la radioterapia y la cirugía.
Si bien los resultados son prometedores, los investigadores enfatizan la necesidad de un seguimiento más prolongado, especialmente en los pacientes con tumores no rectales, cuyo tiempo de seguimiento promedio ha sido menor. No obstante, este estudio representa un avance significativo en la búsqueda de tratamientos menos invasivos y más eficaces contra diversos tipos de cáncer, ofreciendo una nueva esperanza para pacientes con esta mutación genética específica. La terapia inmunoablativa, aunque aún en etapas de confirmación a largo plazo, se perfila como una estrategia «futurista» con un impacto potencialmente transformador en la oncología.
Fuente:
El País